¿Las grietas de las paredes las cubre el seguro de hogar?
La aparición de grietas en una vivienda es un fenómeno muy común. Existen muchas causas por las que esto sucede: dilatación o contracción de los materiales por temperaturas extremas, aparición de humedades, calidad constructiva deficiente, revestimientos mal aplicados...
La cuestión es, una vez que aparecen, ¿cubrirá el seguro de hogar las grietas de las paredes?
Grietas en casa: ¿cuándo preocuparse?
La realidad es que las grietas en las paredes rara vez suelen tener relevancia. Sí, son muy escandalosas y son molestas de ver, pero la inmensa mayoría de ellas no resultan preocupantes desde un punto de vista técnico. Sin embargo, sí pueden convertirse en un problema estético que a nadie le apetece sufrir.
En primer lugar, tenemos que diferenciar entre grietas y fisuras (e incluso microfisuras). Casi todo el mundo mete en el mismo saco cualquier irregularidad en las paredes. Las fisuras son aquellas que tienen menos de 1 milímetro de espacio de separación entre superficies, y son las más comunes. Éstas, a priori, no representan ningún peligro.
Las auténticas grietas son las que tienen una separación mayor a esa cantidad. Aún así, tampoco hay que alarmarse. En función de dónde aparezcan y de cómo sean, nos hallaremos ante un problema real o no.
Grietas de asentamiento: ¿son normales?
En todo edificio de nueva construcción pueden aparecer grietas. Esto es debido a que las estructuras de los edificios suelen ir acoplándose gradualmente al terreno en el que se encuentran. A este tipo de roturas se les denomina grietas de asentamiento, y lo habitual es que aparezcan en paredes y tabiques.
Este tipo de grietas no revisten ningún tipo de problema más allá del estético y pueden producirse a lo largo de toda la vida del edificio. Eso sí, son más frecuentes durante los primeros años. La parte menos mala es que son sencillas y baratas de reparar, pues con algo de masilla, una pequeña redecilla y pintura todo volverá a como estaba.
Grietas estructurales: ¿son peligrosas?
Las grietas estructurales son aquellas que aquellas presentes en pilares, vigas y muros de carga, y son más serias que cualquier fisura en una pared. Para conocer el alcance de una grieta, lo mejor es llamar a un especialista que evalúe su gravedad y si hay que tomar medidas de seguridad.
Si bien tener problemas de grietas no es tan problemático como sufrir aluminosis, también es un problema serio.
Lógicamente, cuanto mayor es una grieta estructural, más peligrosa es y más preocupación genera. Las más peligrosas son aquellas que se presentan en un ángulo de 45º respecto al suelo y con forma escalonada. En cualquier caso, debe ser un experto el que analice la situación y la manera de actuar.
Lo más habitual en estos casos (salvo emergencias) es la revisión periódica de las grietas para comprobar su evolución, si sólo surgen en épocas de calor o frío, etc.
Respecto a esto, toda empresa constructora está obligada a contratar lo que se suele llamar el seguro decenal. Como su propio nombre indica, es un seguro que cubre la aparición de grietas estructurales durante los 10 años siguientes a la construcción.
Grietas en las paredes y el seguro de hogar
Ante este panorama, es natural que quieras saber si el seguro de hogar cubre las grietas de las paredes. Por desgracia, no es un asunto tan sencillo como averiguar si cubre el levantamiento de baldosas (puedes descubrirlo leyendo nuestro artículo haciendo click aquí).
Como norma general, los seguros de hogar no cubren las grietas de ninguna clase: ni las superficiales de asentamiento ni las de tipo estructural. Una excepción a esto es que el motivo de la aparición de las grietas fuese un agente externo. Por ejemplo, unas obras de otro vecino o incluso unas obras civiles colindantes al edificio.
En tal caso, tu seguro de hogar sí podría ayudarte, gracias a la cobertura de Defensa y Reclamación de Daños. Ellos se encargarían de reclamar a quien corresponda, así como de proporcionarte defensa jurídica en caso necesario. Es una cobertura muy habitual en las pólizas de seguro de hogar.
Por contra, hay que indicar también que no suele ser nada fácil demostrar que una grieta ha aparecido por causa de unas obras. Si una grieta aparece en la habitación contigua donde están realizando una obra o si varios vecinos denuncian su aparición por la excavación del terreno colindante, entonces es viable. Si no, la cosa se complica.
¿El seguro de la comunidad cubre grietas?
Por desgracia, la respuesta en este caso es igual que en el punto anterior. Lo más habitual es que el seguro comunitario no cubra tampoco las grietas, aunque puede haber algunas pólizas excepcionales en que sí haya cobertura en casos extraordinarios.
Otro asunto diferente es quién debe pagar la reparación. Una vez que los propietarios saben que el seguro de hogar no cubre las grietas en las paredes, algunos se preguntan si las debe pagar la comunidad.
La respuesta, obviamente, es que no. Cualquier grieta de asentamiento dentro de una vivienda es algo que es responsabilidad exclusiva del propietario. Otra cosa distinta es si se trata de grietas estructurales, en cuyo caso sí se podrán reclamar los gastos a la comunidad... pero no a su seguro.
Cualquier grieta provocado por asentamiento del terreno, asentamiento normal de los cimientos o pérdida de resistencia de los materiales, estará excluido de cobertura en cualquier seguro. El seguro que da cobertura a daños en la estructura es el seguro decenal, de obligada contratación para cualquier edificación destinada a vivienda, no pudiendo inscribir en el Registro de la Propiedad sino se presenta este seguro. Para más información contacta con Seguros Algemesí en los teléfonos 960489818/657903422 o bien a través del correo electrónico info@segurosalgemesi.es
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